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sábado, 12 de mayo de 2012


Alguna vez has has pensado que el estrés puede perjudicar tu manera de vivir? Pues algunos síntomas son: las migrañas, los dolores de espalda, caída de cabello, transtornos del sistema digestivo, problemas menstruales, etc, has escuchado del SHIATSU?

El SHIATSU es una forma de sanación natural, cuyo origen se remonta a los más antiguos métodos de sanación conocidos por la humanidad. Su base teórica es la milenaria medicina China y su práctica se desarrolló principalmente en los países del Extremo Oriente.

El SHIATSU es una herramienta para restablecer y mantener la salud, ajustando y equilibrando el sistema de comunicación primario del cuerpo. Este sistema energético dirige nuestro crecimiento, nuestras funciones, nuestras actividades y nuestra conciencia, desde la concepción y a lo largo de nuestra vida.

El SHIATSU actúa sobre el movimiento de la energía, conocido con el nombre de “KI” (en japonés) o “CHI” (en chino); esta energía circula en el cuerpo por trayectos definidos: los meridianos. El terapeuta SHIATSU aplica diferentes grados de presión sobre estos meridianos y sobre zonas específicas del cuerpo del paciente para equilibrar la energía en los órganos, las glándulas, los músculos, los nervios, la sangre y en todo el organismo. 

De acuerdo con la Medicina Tradicional China, la energía se mueve a través de senderos específicos a lo largo del cuerpo que se denominan meridianos.

Estos meridianos se relacionan tanto con nuestros órganos físicos internos como con nuestras emociones y estados psicológicos y espirituales.

El Shiatsu es beneficioso para todas las personas, tanto para aquellas que desean preservar su estado de salud como para quienes están padeciendo alguna dolencia o problema específico y sus efectos abarcan tanto el plano físico como el emocional.

No existe ninguna limitación de edad para acercarse a esta terapia y puede dar excelentes resultados tanto en niños, jóvenes, adultos como en gente de la tercera edad.

Puede ser utilizado, por ejemplo, por quienes necesitan equilibrar su energía, están pasando por un momento significativo de sus vidas o desean alejar las tensiones cotidianas que traen aparejada una sobrecarga de estrés.

Además, entre otros resultados que pueden mencionarse mejora el tono cutáneo, la flexibilidad muscular y el sistema nervioso, favorece la claridad mental y la concentración, fortalece los ligamentos, estimula los sistemas digestivo, respiratorio y linfático, alivia los problemas menstruales, fomenta un embarazo sano y facilita el parto. También puede aliviar lesiones deportivas, calmar dolores de espalda y de cabeza, contracturas e insomnio. Ayuda a crear conciencia del propio cuerpo y a mejorar la postura, previene enfermedades comunes y modifica estados de depresión, cansancio o estrés.

En la filosofía oriental se determina que el hombre, lejos de dominar la Naturaleza, está a su mismo nivel y debe compenetrarse con ella si desea evolucionar. En la Naturaleza reside el secreto de la relajación, la serenidad, la desconexión, el equilibrio absoluto que se debe mantener en cualquier circunstancia de la vida.


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